Suelo en
esta página poner películas que estén editadas o en plataformas ya que en más
de una ocasión me preguntan dónde se pueden ver. La de hoy es algo más difícil,
está en Disney Plus, sin embargo no la editaron en DVD en España, sí que estaba en
VHS y en varias reediciones con el titulo de El cuarto deseo, aunque la mayoría
la conocemos como Darby y el rey de los duendes ya que TVE la programaba con
este título. Para poder verla en este formato hay que recurrir a un DVD de
importación en el que está en francés e inglés, pero no en castellano, y eso que
había el doblaje, pero ya no es de extrañar estas extravagancias y menos viniendo
de la actual casa Disney que también ha ensanchado algo la imagen y cuya versión original se ha
redoblado según el IMDB.
Su director
es Robert Stevenson, uno de los grandes de la factoría del ratón Mickey, con
títulos como Un sabio en las nubes, Los hijos del Capitán Grant o la inmortal
Mary Poppins, curiosamente su carrera comenzó con otro tipo de cine, una de ellas
Alma rebelde, adaptación de Jane Eyre es una de las mejores que se han hecho.
Es un cineasta por redescubrir con títulos de suspense y romanticismo antes de que
Walt Disney reconociera su talento y lo contratara para este Darby y el rey de
los duendes.
Al tío Walt
le habían fascinado las historias que escribía Herminie Templeton Kavanagh, aquí
poco conocidas y ya tenía en mente una década antes llevarlas a la pantalla, la
II Guerra Mundial motivó un retraso en sus producciones y quedaron aparcadas.
Incluso tenía el actor elegido que no era otro que Barry Fitzgerald, a pesar de
insistir, no logró su participación y atribuyó el fracaso de la película a que
no saliese él. El papel fue para Albert Sharpe, el cual está genial y que fue
un actor que vimos de secundario en Jennie o Brigadoon. Para el papel del chico
protagonista se contrató a un desconocido entonces Sean Connery cuya
participación motivó que Albert Broccoli se fijase en él para ser el futuro
James Bond. La chica era Janet Munro que, desgraciadamente, murió joven y que
aquel mismo año había trabajado en otra notable producción Disney hoy olvidada
Escalada hacia la muerte.
La acción transcurre
en un pueblo, donde el viudo Darby Egil explica cuentos en la taberna donde va
con frecuencia como la de su encuentro con Brian, el rey de los duendes, al que
le pidió tres deseos, que incluían un caldero de oro, pero al cometer el error
de pedir un cuarto, perdió todo lo conseguido anteriormente. La atmósfera del
filme incluso recuerda a los mejores John Ford con sus peleas, tradiciones…Ambientada en Irlanda, el mismo Walt Disney se trasladó varias veces al lugar para recoger
toda la información posible y a varios de sus técnicos para que no hubiese
ningún fallo. Trabajo este, hoy en día despreciado, el hecho de trabajar en
estudio requería un gran esfuerzo para hacer creíble el lugar.
Por otra
parte está el tema de los efectos especiales, que aquí lógicamente se
necesitaban con abundancia. Muy conseguidos y sin tampoco utilizar grades
medios, sino la imaginación ya que se usaba la perspectiva para lograr la credibilidad,
se colocaban a los actores más cerca de la cámara que a los “duendecillos” y se
alineaban en el mismo plano horizontal a través de una lente para que la
distancia entre ellos no se detectase.
La historia,
aparte de su comicidad y romance, tiene un giro hacia el cine de terror, la
muerte está bien presente, recuerdo cuando era pequeño y la veía que hasta daba
miedo. Me sabe mal que si no se está abonado a Disney Plus es bastante difícil
verla, si tienen la oportunidad no lo duden, se llevarán una gran
sorpresa y de paso reivindíquenla, muchos clásicos Disney corren el riesgo de desaparecer al no ser tratados por la actual directiva Disney como merecen.
El pasado 31 de octubre nos llegaba la triste noticia de la muerte de Sean Connery a los 90 años de edad, a pesar de que su salud ya no estaba bien nos sorprendió la noticia. Y es que Connery era de esos actores que uno admira y hasta se le hace familiar. Supo no encasillarse con James Bond, tarea complicada, y ya desde un buen principio quiso demostrar que era un gran actor con una filmografía notable.
Como homenaje me gustaría citar las películas que rodó en España, que no fueron pocas y para más satisfacción muy buenas.
Desde Rusia con amor (Terence Young, 1963)
No, no me he equivocado. Para el rodaje del segundo largo de James Bond se tenían que incluir escenas rodadas en un depósito de agua con ratas marrones salvajes corriendo por los sótanos en un depósito de agua de Estambul. La ley inglesa impedía el uso de ratas reales, así que el equipo vino a Madrid y pidió 200. Se las entregaron en un garaje que había sido transformado como decorado para la película y ahí se filmó la complicada escena.
La colina (Sidney Lumet, 1965)
En su día un fracaso comercial, pero un gran éxito artístico para el actor, ya que supuso coger un papel difícil en pleno éxito de James Bond, tanto quiso dedicar el actor a esta película que hasta dejó de ir al estreno de James Bond contra Goldfinger para seguir con el rodaje. La película consiguió que Connery fuera considerado para otros papeles, en ella su director Sidney Lumet conseguía un filme duro lleno de acentos antimilitaristas que en España estuvo censurada a pesar de dejarla rodar. En Cabo de Gata (Almería) se construyó el cerro de castigo, también se rodaron partes en Málaga.
Shalako (Edward Dmytryk, 1968)
)
Connery probó suerte con un western rodado en Almería a las órdenes de Edward Dmytrick y al lado de Brigitte Bardot. Aunque la película es algo irregular, su actuación fue bastante alabada, en "La Vanguardia" de aquellas fechas se puede leer lo siguiente: “Si algo faltaba, cabe apuntar la calidad interpretativa. Porque Sean Connery crea en «Shalako» una de las figuras de explorador del Oeste más acertadas y expresivas que hemos visto.” J Pedret Muntañola (22-12-68)”
El viento y el león (John Millius, 1975)
Personalmente, creo que hace una de sus mejores interpretaciones de su carrera como El Raisuli en una película que nos devolvía todo ese aroma del cine de aventuras de antaño. La ambientación corrió a cargo del maestro Gil Parrondo y es una delicia su visión: En los Reales Alcázares de Sevilla se recrea el interior del palacio del Sultán, mientras que en el exterior del antiguo edificio del Museo de las Artes y Costumbres Populares en la plaza de las Américas de la ciudad se ruedan enfrentamientos militares.
El Castillo de la Calahorra (Granada) se transforma en la fortaleza de El Raisuli, al tiempo que son instalados sus campamentos beréberes en las playas de Monsul, Los Genoveses y Matalascañas. También podemos ver el Cabo de Gata (Almería) y el Coto de Doñana (Huelva). En Madrid son localizados escenarios naturales como los de la estación de Delicias, una finca de Aranjuez para los ejercicios de tiro, el Parque del Retiro y el hotel Palace de la capital que se convertía nada menos que en la Casa Blanca. En Segovia, la Boca del Asno simula ser el parque de Yellowstone.
Sir Sean Connery quedó tan impresionado con el guionista y director John Milius que solicitó sus servicios para La caza del octubre rojo (1990). Aunque no aparece acreditado en esta, fue quien realmente le dio al prsonaje ese tono de hombre ya vencido por la vida y abandonado tras una guerra que no le ha traído ninguna gloria individual.
Robin y Marian (Richard Lester, 1976)
Richard Lester que había rodado anteriormente en España, quiso firmar en Navarra, en el Alto de Urbasa y Lecumberri. El Cerco de Artajona, donde se hicieron algunos añadidos a su muralla sirvió para marcar los territorios del sheriff de Nottingham, el impresionante salón del antiguo Palacio de Capitanía, hoy Archivo General de Navarra,fue elegido para la muerte del Rey Ricardo. Las localizaciones para la escena de la fortaleza asediada al principio del film fueron efectuadas en el Castillo de Villalonso en Zamora.
Gil Parrondo también se ocupó de la dirección artística e Yvonne Blake del vestuario, a Connery le gustó la armadura confeccionada con ante, cuero y tachuelas de cobre.
Se trataba de un Robin Hood ya viejo, cansado, 18 años después de su partida a las cruzadas. De hecho, la película se tenía que llamar La muerte de Robin Hood. Lady Marian estaba interpretada por Audrey Hepburn que era ahora una madre abadesa, Robert Shaw era el Sheriff de Nottingham y Richard Harris el rey Ricardo Corazón de León. En el reparto encontramos también a una jovencísima Victoria Abril y presencia catalana a cargo de Montserrat Julió y Margarida Minguillón.
Un final maravilloso hizo llorar a los espectadores. Sean Connery afirmó que estaba bastante satisfecho con la escena. Después de años de interpretar al mismo personaje en la franquicia cinematográfica de James Bond, Connery estaba feliz de interpretar a un personaje en el que no había posibilidad de tener una secuela.
Cuba (Richard Lester, 1979)
Nueva reunión de Lester con Connery, y de nuevo rodaje en España, esta vez en Cádiz, obviamente en Cuba no podían rodar. El productor ejecutivo Denis O'Dell dijo una vez sobre el uso de España para retratar a Cuba: "Cuba ha cambiado radicalmente en veinte años, pero Jerez de la Frontera, Cádiz y Sevilla, que fue una fuente importante de arquitectura cubana en en primer lugar, apenas han sido tocados por el tiempo ".
Tenía la intención de ser una película tipo Casablanca (1942), pero ambientada durante la Revolución Cubana y la caída del régimen de Batista en 1959. Uno de los carteles principales de esta película fue diseñado con ilustraciones pintadas, con Sean Connery sosteniendo una pistola negra en su brazo alrededor de una mujer y presentaba a varias chicas en bikini y mostraba escenas de la película, todas típicas de James Bond ya que la productora era la United Artists, la misma de las películas de 007
La película no gustó al actor que tuvo varios roces con su director, la crítica tampoco la valoró mucho, aunque se ha estado reivindicando por ciertas minorías.
Nunca digas nunca jamás (Irvin Kershner, 1983)
El retorno de Sean Connery como James Bond tuvo varias localizaciones: Francia, Las Bahamas, Gran Bretaña, etc. En un principio no se había planteado rodar en España, pero el actor quiso que así fuera y lo recomendó. Almería fue la afortunada, en los Escullos se rodaron escenas submarinas. Otros escenarios fueron el Cabo de Gata, el puerto de Almerimar y el túnel de la carretera de Aguadulce.
Indiana Jones y la última cruzada (Steven Spielberg, 1989)
La tercera entrega del mítico arqueólogo aventurero venía acompañada esta vez por su padre encarnado por Sean Connery y también había un prólogo en el que vemos a Indiana Jones joven encarnado por River Phoenix, las casualidades han querido que el 31 de octubre haya sido la misma fecha en que murieran dos los actores.
Spielberg eligió Andalucía para rodar la película, las primeras localizaciones escogidas para la filmación son en Almería: Ramblas Indalecio y Viciana en Tabernas, Lanos Trujillo y Tesica, Baños de Alfaro, así como diferentes playas y localidades de la provincia, incluyendo la propia capital. Se recrea el palacio del Sultán en la Escuela de Bellas Artes de Almería, una persecución en Iskelderun en las calles junto a la Alcazaba, la secuencia de Sean Connery espantando las gaviotas en la playa de Mónsul de San José, así como la carretera y el túnel de Rodalquilar o el campo de aviación de Mojácar.
Los equipos se trasladaron a Granada para filmar las escenas del tren de la ciudad turca Iskelderun en la estación de ferrocarril de Guadix, así como la encrucijada con Berlín en el cruce entre las Mimbres y la aldea de Prado Negro en Huétor-Santillán (Sierra Alfaguara). Spielberg rechazó rodar en la Alhambra al considerarlo un monumento demasiado famoso que restaría credibilidad a la historia. Fue necesario contratar a numerosas figuración granadina al precio de 5000 pesetas la sesión .
Sean Connery siempre fue la primera opción de Steven Spielberg para interpretar al padre de Indiana Jones, como una broma interna para decir que James Bond es el padre de Indiana Jones. Connery se negó a volver a interpretar al papel de Henry Jones en Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal (2008) para disgusto de su director.