21/12/2023

Feliz Navidad y cinco películas de los 80

 

Ya en vísperas de Navidad y este blog os quiere felicitar las fiestas y agradecer vuestra lectura semanal, ya que son fechas especiales, hoy cambio el formato y os recopilo 5 tráilers de películas de los 80 que nos gustaban, o quizá lo contrario, ver durante estos días.

 Empiezo por Los fantasmas atacan al jefe, esta fue una versión moderna del popular Cuento de Navidad de Charles Dickens con un Bill Murray más irónico que nunca, el título en español aprovechaba el éxito de Los cazafantasmas, en televisión no paraba de darla Tele5 cada año en los 90, incluso a veces hasta fuera de fechas. Murray luego se superaría en Atrapado en el tiempo y como si fuera la marmota, siempre la vemos, aunque la sepamos de memoria.

   

 Otra comedia ochentera navideña fue Entre pillos anda el juego (1983), un inspirado John Landis ofreció una comedia con aires de clásico. El reparto contaba con otro "cazafantasmas" Dan Aykroyd y un Eddie Murphy antes del Superdetective en Hollywood, mención aparte merecen Ralph Bellamy y Don Ameche, geniales malvados aquí. Con este film, algunos entendieron cómo funcionaba la Bolsa.

 

Dejamos de momento las comedias y nos vamos a una película de amor, cuando en 1995 Meryl Streep protagonizó Los puentes de Madison, el más cinéfilo ya sabía que la actriz tenía experiencia en un papel similar, se trataba de Enamorarse (1984) en la que se enamoraba de Robert de Niro, el flechazo empezaba en un metro, pero sobre todo en una librería en plena compra impulsiva navideña donde, por error, se intercambiaban los títulos. Dirigida por Ulu Grosbard, no dejaba de ser otra especie de “remake” de Breve encuentro. La película no estaba nada mal.

   

 Vamos ahora al género de terror, en 1984 Steven Spielberg consiguió uno de sus mayores éxitos como productor, se trataba de Gremlins y la dirigía Joe Dante, con los años ya se ha convertido en todo un clásico de estas fiestas a pesar de ser un filme totalmente antinavideño, incluso en algunos de sus diálogos. La nostalgia ha convertido todos esos bichos feos más el bueno en unos iconos de un tiempo que ya no volverá, de cuando íbamos asiduamente al cine, alquilábamos y comprábamos el VHS, esperábamos su pase por televisión, nos comprábamos su banda sonora, los muñecos…

   

Y para acabar con este quinteto, recurrimos a Santa Claus. El director Jeannot Szwark que quedó muy tocado por haber dirigió aquella Supergirl, pero tuvo una de sus películas más recordadas con Santa Claus, el film. David Huddleston hacía el papel, aunque la estrella era el hoy ya muy olvidado Dudley Moore cuya comicidad estaba en auge. No era una gran película, pero sí un film simpático, agradable, que llenaba alguna que otra tarde pesada, la música era de Henry Mancini, por cierto. Título bastante reivindicado por el recuerdo también, ni en DVD ni en plataformas está, a veces algún pase perdido....

13/12/2023

Un mundo de fantasía (1971): El primer Willy Wonka

 



Se acaba de estrenar una nueva versión del libro de Roal Dahl Charlie y la fábrica de chocolate, la verdad es que cuando vi el tráiler hace unas semanas pensaba que sería la típica película para pasar las navidades, pero la crítica está diciendo maravillas de ella, incluso añaden la muletilla que hasta uno se olvida que es Timothée Chalamet quien hace de Wonka. Como recordarán tal personaje fue interpretado anteriormente por Gene Wilder y Johnny Deep, aprovechando el momento vamos a repasar la primera versión de 1971.



Dahl había escrito el libro en 1964 y Mel Stuart, un director no muy conocido, recibió el encargo nada menos que de su hija, la cual se encaprichó de aquella lectura y le pedía que hiciera una película, al final aquel empeño pudo y se puso manos a la obra. Está catalogada como musical, aunque los números son pocos y la coreografía algo pobre, la partitura corrió a cargo de Anthony Newley y Leslie Bricusse que tenían ya cierta experiencia en similares producciones dirigidas a un público infantil como Muchas gracias, Mr. Scrooge o El extravagante Dr. Doolitle. Este tipo de cine estaba de capa caída como corroboran fracasos como Las aventuras de Alicia, El pájaro de fuego y cierto bajón en la Casa Disney que no acababa de encontrar su línea desde la muerte de Walt en 1966.



En España la conocimos como Un mundo de fantasía y su estreno fue en unas navidades, sus números fueron flojos, apenas 288.510 espectadores y cayó en el olvido, salvo cuando se reponía en televisiones también por esas fechas ya que lograba una buena audiencia. La versión de Burton rescató tal versión y comenzó a ser editada en DVD, por cierto en una excelente edición en el extranjero. También se puso de moda, hace unos años, con la cara de Wilder hacer unos "memes" a través del WhatsApp o de otras redes sociales  donde el personaje irónicamente lanzaba una pregunta.

Fuente: Perú21

Gene Wilder por aquel entonces aun no tenia la fama posterior, aunque ya había trabajado con Mel Brooks en Los productores, película que en nuestro país se estrenó tarde y después del éxito de El jovencito Frankenstein, su personaje sirvió también para que apareciera en un papel en la versión musical que Donen hiciera de El pequeño príncipe. Probablemente sea de sus mejores creaciones, le puso una condición al director y esta era que le dejara en la primera escena salir cojeando y luego dar un salto para que así el público no supiera si está diciendo la verdad. Tal idea parece que gustó a Mel Stuart que utilizó también la táctica de rodar las reacciones de los actores sin que supieran si aquello formaba parte del guion, hasta en una escena los actores pensaban que Wilder había sufrido una crisis psicótica.


No he leído el libro, así que no puedo comparar, pero deduzco que bebe bastante de clásicos de la literatura infantil como Alicia en el país de las maravillas, él mismo quiso participar en el guion y a pesar de tener una historia que visualmente podía ser bastante rica, no logró los resultados esperados:  los ríos y cascadas de chocolate, las ocas gigantes que ponen huevos de oro, burbujas que permiten volar, los caramelos que nunca se acaban, televisores que envían a través de las ondas objetos y personas en vez de imágenes no acaban de convencer, aunque el encanto kitsch en años posteriores les hace tener algo de encanto.


Tampoco la historia es nada del otro mundo, cinco niños que ganan un sorteo para ver la fábrica de tal enigmático personaje , todos ellos llenos de tópicos, desde el glotón, la avariciosa, el tramposo o el niño protagonista que es humilde, con buen corazón y con cara de no haber roto ningún plato, ya lo dice el personaje en un momento que todos son unos maleducados, incluidos sus padres que los acompañan que aun son peores. Pero a pesar de estas objeciones, lo que salva el film es la actuación de Gene Wilder, por lo que la película se ha revalorizado y va gustando más. La versión de Burton, aunque más rica visualmente, tenia mucho de su mundo particular y se le acusó de no ser fiel al espíritu del escritor.

Veremos, pues, si esta nueva versión corrige los defectos de las dos anteriores a pesar de Timothée Chalamet.

05/12/2023

Homenaje a Concha Velasco: Yo soy fulana de tal (1975)

 



El pasado sábado fallecía la gran Concha Velasco, su nombre se añade en este año funesto a los de Carlos Saura, Laura Valenzuela, Carmen Sevilla…Por eso, voy a dedicar un pequeño homenaje, algo improvisado, escogiendo una de sus películas de las que no se habla tanto. Estos últimos días en los resúmenes que se han hecho en distintos medios se han citado sus colaboraciones con Pedro Olea, su excelente recreación de Santa Teresa de la mano de Josefina Molina o su etapa con Sáenz de Heredia, curiosamente sin mencionar demasiado su nombre, cabe recordar que quizá fuera el director que le dio gran popularidad cuando la puso a cantar la chica yeye en Historias de la televisión, de él son también las mejores películas de su tándem con Manolo Escobar o su salto hacia papeles dramáticos con Los gallos de la madrugada para dejar de ser Conchita.




Pero hubo otro director también apenas citado que le dio unos papeles en comedias bastante notables, me estoy refiriendo a Pedro Lazaga, mis lectores habituales sabrán que soy un gran defensor de él, Los tramposos (1959), Trampa para Catalina (1961), Sabían demasiado (1962), Martes y trece (1962), El vikingo (1972) son buenas muestras en las que la actriz aportaba su talento en unos guiones que la crítica solía infravalorar. Injusto sería olvidarme de Mariano Ozores, Javier Aguirre, José María Forqué, Jaime de Armiñán, Rafael J. Salvia, Fernando Palacios, Fernán Gómez, Berlanga…Incluso de Rovira Beleta que le dio también uno de sus primeros papeles dramáticos y en una coproducción internacional en No encontré rosas para mi madre (1973) que tantos disgustos le ocasionó a él y ella años más tarde la recordaba como una película porno, aunque no lo fuese, pero en Francia se añadieron escenas sin el consentimiento del director, creo que su actuación ayudó bastante a que tuviera papeles más dramáticos luego.

Pero de la que voy a hablar es de una de Lazaga cuyo título es Yo soy fulana de tal del año (1975), tal año fue muy prolífico para la actriz, nada menos que siete películas, entre ellas su actuación más querida según confesó en un homenaje en la Filmoteca de Cataluña: Pim, pam, pum... ¡fuego! de Olea y títulos nada desdeñables como Las bodas de Blanca de Francisco Regueiro, Mi mujer es muy decente, dentro de lo que cabe de Antonio Drove o El love feroz de José Luis García Sánchez.

Yo soy fulana de tal partía de una novela de 1963 de Álvaro de Laiglesia quien fuese director de la revista satírica "La codorniz" durante 33 años, aquella cuyo lema era: “La revista más audaz para el público más inteligente”, el escritor declaraba que sus libros ya los vendía solo con el título, algunos ejemplos son: En el cielo no hay almejas, Todos los ombligos son redondos, Qué bien huelen las señoras o Dios le ampare, imbécil, novelas que había  que leer entre líneas.

Concha interpreta a una chica de pueblo que acaba convirtiéndose en una prostituta, nos va narrando su vida y ese mosaico variopinto de hombres con los que va saliendo. Sé que puede parecer una película vulgar y no apta para ciertas sensibilidades feministas, obviamente no la voy a calificar de progresista, pero conviene situarse en los años de la novela y de la película y ya que Lazaga tuvo esa audacia al dirigirla, convendría dejar paso a la inteligencia para analizarla como se debe y no ir con los prejuicios típicos.

Al disponer de un buen material con este libro, supo sacar esa influencia italiana al máximo y que tenía en bastantes de sus comedias, aunque teniendo que esconderla por la censura. Su filme es más parecido a los de Pietro Germi o Mario Monicelli, activa notablemente en todo su metraje las contradicciones entre los actores y ella a la que explota bien con una de sus actuaciones más memorables en las que va cambiando de registro sin perder la credibilidad, ahí la tenemos como una chica ingenua y cándida o caricaturizando su oficio, me recuerda a la Giulietta Massina de Las noches de Cabiria que tanto alababa.

Detrás de todo ese humor hay la crítica contra los acondicionamientos sociales que lleva a una mujer a acabar siendo eso, estamos pues en una comedia que más de uno sin verla la tachará de machista, casposa y vulgar, algo totalmente injusto. Hay además, y siguiendo con ese toque italiano, aspectos neorrealistas y la inserción de escenas más dramáticas.

En el reparto tenemos a varios de los grandes: Antonio Ferrandis, Francisco Algora, Fernando Fernán Gómez…todos ellos perfectamente dirigidos por un Lazaga que dotaba de un ritmo vertiginoso, tan característico en él, la acción. La propia Concha Velasco siempre tuvo palabras de cariño hacia él y que los actores que trabajan con él le querían.

La película en pleno 1975 tuvo sus bueno números, aunque se quedó a las puertas del ansiado millón de espectadores, Lazaga era repudiado por muchos críticos, incluso en un festival de Molins de Rei en el que se le quiso homenajear tuvo él mismo que declinar porque se le tachaba de director de época franquista y no quería perjudicar. El film conoció una secuela Fulanita y sus menganos, aunque Concha fue sustituida por Victoria Vera y según contaba la actriz, un productor de varias salas la había vetado por haber apoyado una huelga de cines y presionó para que no la protagonizara. La secuela recaudó la mitad y no tenía tanto ingenio, a pesar de seguir contando con Lazaga.

No he podido hallar ningún vídeo de alguna escena, la tenía en DVD y tuve la mala pata de que el disco estaba defectuoso, aunque la pude visionar de aquella manera hará unos 10 años. Desde estas líneas mi recomendación y que este título pudiera hallarse de manera más accesible ya fuera en plataformas como FlixOlé o reeditando el DVD que aun se podría encontrar por internet a precios de escándalo. Descanse en paz Concha Velasco y agradecerle todo su gran trabajo y su cercanía al espectador.





El reportero (Michelangelo Antonioni, 1975)

La figura del director Michelangelo Antonioni con el tiempo ha sufrido evoluciones que van desde quienes lo consideran todo un genio del sé...