Este martes 9 de agosto saltaba por la noche la noticia de la muerte de Olivia Newton-John, la cual ha sido muy llorada por la mayoría. La inolvidable Sandy de Grease (1978) se hizo querer por un público que en el momento del estreno de la película iba más por la fiebre Travolta que por ella, a pesar de tener ya una un nombre en el mundo de la canción.
A pesar de la excelente química entre ambos, Hollywood no supo explotarlo, su carrera cinematográfica fue escasa y discreta.
Pero es igual, aquella Sandy con peinado de Sandra Dee que tan bien parodiaba Stockard Channing y que nos deleitaba con su cambio al final es uno de los momentos más inolvidables para cualquier generación. Y es que Grease es una película que no envejece nunca, más bien al contrario.
Sin embargo, hubo un lapso de tiempo en que parecía que se iba a quedar en el museo del recuerdo. Hablo de los 80, una década tan reivindicada por los "egeberos" y llena de iconos, pero en la que Travolta iba de fracaso en fracaso y a Olivia no la supieron valorar.
El primer intento tras Grease fue otro musical llamado Xanadú (1980) al lado del gran Gene Kelly, pero la crítica no tuvo piedad con esta especie de remake de La diosa de la danza con Rita Hayworth, y daba la sensación que si ibas a verla estabas más o menos chiflado, así que quedó rápidamente en el olvido. TVE la recuperó a mediados de los 80, aunque postergándola a lo que entonces era la UHF unas Navidades, pero tampoco logró resucitarla. Hoy en día, ciertos grupúsculos la veneran como película de culto
El otro intento fue Tal para cual en 1983, una comedia angelical, subgénero que se puso de moda a finales de los 70 a raíz de la versión que Warren Beatty hizo de El cielo puede esperar, pero la comedia era flojísima, los premios Razzie que son los antioscars premiaron a la pareja, al guion, al director y a la película, Sin embargo, el disco se vendió bien con temas cantados por ella.
Se habló de que la pareja protagonizara un remake de Una cuestión de vida o muerte o de una versión de la obra de Neil Simon Están tocando nuestra canción, pero los productores decidieron que aquello ya había acabado, que el mundo de ella era el de la canción y Travolta había caído en desgracia.
Así que Olivia Newton John solo aparecía en telefilmes olvidables y algún cameo como el que le brindó John Hughes en La loca aventura del matrimonio y Travolta hasta se fue a Canadá para protagonizar algo.
Fuente: Hemeroteca de La Vanguardia. Programación de TVE1 de Nochevieja del 87 al 88
Fíjense lo olvidada que estaba la pareja que TVE emitió el segundo pase de Grease (el primero fue en el 85) a las 5 de la mañana una Nochevieja del 87 al 88, el programador debió pensar que iría fantásticamente bien para las resacas de esa noche.
Pero en aquel 1987 algo cambiaría, un éxito inesperado de una película, discreta en su momento, provocó a la larga la resurrección de Grease, hablamos de Dirty Dancing con Patrick Swayze y Jennifer Gray, su banda sonora revival se vendía perfectamente y no paraba de sonar en las discotecas. Alguna mente con buena vista tuvo la idea de relanzar la banda sonora de Grease ya que si compraban aquella, también podían comprar esta y reestrenar de paso la película.
Aquel 1990 encima Travolta conseguía un éxito tras 12 años con Mira quién habla, así que la resurrección de Grease tuvo efecto y volvió para ya no marcharse más. La entonces incipiente Tele 5 compró los derechos de emisión, y la programó un 26 de junio de 1991 tras publicitarla durante meses con la voz entonces habitual de Justino Bermúdez diciendo “Próximamente en tu pantalla amiga” y liderando la audiencia en cada pase veraniego. TVE tuvo que esperar hasta mediados de los 2000 para recuperarla y programarla.
En 1998 con motivo de los 20 años de su estreno, volvió a la gran pantalla, recuerdo el Palacio del Cinema de Barcelona en la que estuvo un mes, en VHS aparecía una nueva copia con el formato algo arreglado por fin, en el mundo del teatro empezó a gestionarse llevar el musical, con lo que otra generación descubrió la película en los años siguientes. Aun hoy en día el musical sigue en pie con diferentes actores.
Todo funcionaba tan bien que hasta se pensó en un Grease 3, pero quizá el mal recuerdo de la secuela hizo que el producto no saliera a la vista, aunque el guion sí fue a parar a la Disney que tampoco creyó mucho en este y al contrario de Grease que tanto podía ser visto por adolescentes como público más mayor, lo retocó y se dirigió más hacia el primer grupo y con el título de High School lo lanzó directamente a su Disney Channel. Sin embargo, a ese público exclusivamente adolescente le sirvió para redescubrir también Grease que sigue siendo el único musical que programan las televisiones con audiencia, el único DVD o Blu-Ray que nadie tiraría a la basura y el único CD que rueda en el antiguo equipo de música.
Pero no todo eran alegrías, en 1992 a Olivia le detectaron un cáncer de mama del que felizmente se pudo reponer, ella luchó por vivir y fue una gran activista contra la enfermedad. En el 2013 recaía, pero venció. Sin embargo, en el 2017 la enfermedad le provocó una metástasis, a pesar de ser consciente de que le faltaba poco para el fatal desenlace, no perdió las ganas de vivir y seguía apareciendo en púbico.
Como homenaje, un pequeño repaso a su carrera musical. Hasta siempre juntos, Olivia.
"Let Me Be There" (1973)
"Long Live Love", su actuación en Eurovisión de 1974 por el Reino Unido
Tedioso agosto de temperaturas altas tanto en la calle como en las tiendas, pesimismo en cualquier conversación y en líneas generales hartazgo de casi todo... Suerte tenemos, y no somos plenamente conscientes de ello, de ser cinéfilos y aplicar esa “vida de repuesto” que tan bien describía José Luis Garci en una entrevista. Al no hacer vacaciones, cuando me preguntaban a dónde iba, respondía que estaría unos días con Monsieur Hulot contemplando aquel mar de Saint-Marc-sur-Mer que esos niños descubrían de repente en uno de los primeros planos, quizá visitaría de nuevo el Innisfree de El hombre tranquilo de John Ford porque un pueblo donde se unen fuerzas y tanto aplauden al cura católico como al protestante sería lo más cercano al paraíso, y también marcharía a Ischia de la mano de Billy Wilder en Avanti . Seguro que me tomarían por más chiflado de lo que estoy, pero desconectaría de ese mundo tan cansino que aparece en nuestras conversaciones, algo que sigue siendo el principal objetivo de cuando uno marcha, al menos así era...
¿Qué ocurrió entre mi padre y tu madre? (1972) fue el vulgar título que en España se puso a Avanti, yo la descubrí por televisión y aun recuerdo el comentario que aparecía en un diario: “El peor Wilder sigue siendo una gran película”, han pasado ya años de aquel pase y con el tiempo se ha ido reivindicando, recurro de nuevo a Garci que la citaba con frecuencia en Qué grande es el cine, en la 2 entonces, y la calificaba de obra maestra, lástima que no la emitiera nunca si no me falla la memoria. También el crítico Edmond Orts en su libro de Cien películas inolvidables la califica de obra maestra y aconseja que cuando la veamos, nadie nos moleste para nada.
Avanti cuenta las andanzas de Wendell Armbruster (Jack Lemmon), un hombre de negocios casado americano que se ve obligado a viajar a Italia, donde su padre ha muerto en un accidente de coche. Ahí se entera de que su padre tenía una amante, que lo acompañaba en el momento del accidente. Conoce a la hija de la amante de la que se enamora y reproducirán los “pecados” que cometían cada año entre el 15 de julio y el 15 de agosto por esas tierras.
Aunque la película en España funcionó bien, contó con casi un millón y medio de espectadores, es cierto que Wilder estaba menospreciado en EEUU y sus películas no contaban con tan buenas críticas como antaño desde el Bésame, tonto (1964) y es que no gustaba por ahí que se reflejara esa doble moral de forma tan explícita. A pesar de ello, consideraba Avanti como blanda y que por ello en EEUU no había tenido el éxito esperado, le daba la vuelta a la tortilla y de forma irónica le contaba a Cameron Crowe en Conversaciones con Billy Wilder que la versión que tenia en la cabeza era que el padre de él fuera homosexual y tuviese un botones a su lado en el momento del accidente.
A pesar de minusvalorar su trabajo como suelen hacer los genios, Wilder ofrecía un retrato ácido sobre las medias verdades, las costumbres estadounidenses enfrentadas con las europeas, la burocracia, una visión caricaturesca de Italia que siempre le ha gustado reírse de sí misma…El argumento partía de una obra de Samuel Taylor, el mismo de Sabrina, y cuenta con una serie de personajes secundarios espléndidos como el director del hotel (Clive Revill), el enterrador (Pippo Franco) del que suelta que siempre está ocupado porque conoce a todas las viudas, el empleado deportado, el diplomático estadounidense (Edward Andrews) con sus aires de grandeza…
Durante las dos horas y cuarto, también se despliega cierta melancolía aderezada por las canciones que van apareciendo como la mítica “Senza Fine” de Gino Paoli. Ciertas normas no escritas dicen que en verano tenemos que ser más ligeros en nuestros artículos y creo que al final he hecho un post largo, así que concluyo recomendando que se vayan de vacaciones viendo Avanti, y que escuchen sus canciones, muchas no son las originales que salen, pero creo que les gustará. Hasta la semana que viene
'Cuore ´Ngrato' Cordiferro Y Cardillo:
'Un Óra Sola Ti Vorrei' Bertini Y Marchetti
'Palcoscenio' E. Bonagura, A. Giannini Y S. Bruni
'La Luna' Don Backy Y Detto Mariano: En la película suena instrumentalmente solo, esta versión que es la única que he encontrado del tema está cantada por Milva
'A Taza E´ Caffe' G. Capaldo Y V. Fassone
Esta napolitana también solo suena instrumentalmente en la película, la versión aquí ofrecida está cantada por Gabriele Vanorio
Y como no la gran "Senza Fine" cantada por Gino Paoli:
Y aquí una suite con los temas más la música añadida y arreglos de Carlo Rustichelli :
Y si quieren escuchar la banda sonora entera, en youtube está puesta:
Hace unos días, mientras navegaba por la red social Twitter encontré a un usuario que colgaba
fotos de un famoso centro comercial de Madrid donde antaño sus estanterías se llenaban de DVDs, en cambio ahora unos feos muñecos peludos los han
sustituido. Como dirían aquellos curas de antaño, son los “signos de los
tiempos”, pero sin querer tampoco ser tan pesimista, es una realidad que la
desaparición del formato físico lleva consigo un retraso cultural y con ello
que nos marquen lo que podemos ver. Seguro que los que aun coleccionamos estas
ya casi reliquias nos habremos encontrado con diálogos del tipo “para qué
quiero eso si ya está en esa plataforma”, luego se lamentan si aquel sitio de
golpe y porrazo deja de tener tal película y te sueltan aquello de “si lo llego
a saber, la compro”.
Hay películas,
no obstante, que no están en ninguna plataforma y sí en DVD, precisamente hoy
quiero recomendar tres dirigidas por Dino Risi, que los habituales en mi blog
ya saben que es una de mis debilidades. Se trata de la denominada “Trilogía del
optimismo” y está compuesta por Pobres, pero guapos (1957), Guapas, pero pobres (1957) y Pobre
millonario (1959). En otros países se han editado conjuntamente en un pack.En la edición en España de estas no aparece
la marca, aunque he comprobado que se trata de un disco prensado, o sea que no
hay que temer nada, se pueden ver dobladas y en versión original con subtítulos,
la calidad de imagen es bastante buena.
Dino Risi
A Dino Risi
nunca se le ha acabado de reconocer como se merece su carrera, en medio de ese
Neorrealismo italiano que tanto impacto causó por su austeridad, falta de
grandes estrellas y bastante amargura, él tomó otra vía al que rápidamente se
le tachó despectivamente de “Neorrealismo rosa”, en los repartos contaba con
las estrellas del momento, había humor y uno salía contento del cine. De todas
maneras esa felicidad solo era aparente, él fue todo un maestro en enseñarnos
un tipo de comedia “falsa” en la que el público menos exigente no prestaba
mucha atención a lo que en realidad se decía y podía verla sin pensar que acudía a un drama.
La crítica
oficial de entonces que tenía a De Sica como su gurú antes de que apareciera
Godard y se olvidaran de él, vio con malos ojos esas películas, en cambio los cinéfilos más jóvenes
empezaron a valorarlo. Esta guerra entre críticos tuvo su punto álgido en 1957
cuando su película Sabela gana la Concha de oro del Festival de San Sebastián y provocó más de un silbido
entre ese público que también te decía que si eras de Rossellini no podías ser
de Visconti. Años más tarde y a raíz de La escapada, el cine de Risi empezó a
ser ya más aceptado, aunque ello coincidió con un cambio de estilo, ya no había
tanta comicidad, el pesimismo ya se mostraba sin ropajes y la imagen de Italia
era que no tenia remedio, como bien reflejó en aquella espléndida En el nombre del pueblo
italiano.
En esta
trilogía asistimos a las andanzas amorosas de dos jóvenes agraciados físicamente,
aunque no en el bolsillo (Renato Salvatori que estaba perfecto en las comedias,
a pesar de haber cultivado más los dramas y Maurizio Arena, que no tuvo suerte posteriormente).
Hay en toda la película situaciones que bien podrían ser herederas de Charlot,
Salvatori vive de realquilado, pero no puede utilizar su cama durante el día ya
que la ha de alquilar para un conductor, por ejemplo. Una de las mejores escenas es cuando entran en la tienda donde despacha la chica de la que se han enamorado los dos. (NOTA: l siguiente vídeo es de Youtube y la calidad de imagen no es muy buena, la del DVD sí que está remasterizada)
Creo que disfrutarán
con estas películas, seguramente si van a comprarlas ni las vean expuestas y tendrán
que pedirlas. No esperen a que tal plataforma las ponga, la desaparición del
formato físico llevaría a que no pudiésemos seguir las filmografías de directores
tan interesantes como el que propongo y a no poder valorar, comparar
y tener un juicio objetivo de la historia del cine.
Aprovechando la efeméride y con el objetivo de reivindicar esta película algo olvidada, traigo esta semana Dragon Rapide (1986) de Jaime Camino. Sé que mis lectores son instruidos, pero para aquellos que navegando se encuentren esta página, siempre que Google quiera, y sean victimas de los planes de educación actuales, decirles que no les hablaré de una película japonesa de artes marciales ni nada parecido. El Dragon Rapide era un avión, concretamente un De Havilland (DH) 89, que financiado por Juan March vino desde Inglaterra y trasladó a Franco a Tetuán desde Las Canarias para ponerse al frente del ejército de Marruecos en lo que fue el inicio oficial de la Guerra Civil española aquel julio de 1936.
Jaime Camino que tenía entonces en su haber tres grandes películas sobre el tema: España, otra vez, (1968), Las largas vacaciones del 36 (1976) y La vieja memoria (1979), llevaba tiempo queriendo llevar este tema y como en 1986 se iban a cumplir los 50 años de aquello, recurrió a Román Gubern para que escribiera el guion y contrató a Ian Gibson para asesorarle. El director bien sabía porque había esperado tanto tiempo en llevarlo a la pantalla ya que provocaría controversias en una España que ya llevaba una década de transición.
Así pues declaraba que: “creo que la gente va a recibir la película con expectación y creo que va a suscitar polémica porque sobre Franco cada uno tiene su opinión, para los que lo tienen sacralizado, será una sorpresa encontrarlo mucho más de carne y hueso. La gente de izquierdas maniquea, que aun piense en los buenos y los malos, se encontrará con que en el film es un personaje entendido, explicado, con todas sus dudas, que las tuvo”. Gubern sugirió y acabó aportando un personaje falso, el del periodista que tenía que empezar las vacaciones justo el 18 de julio, para “dar el contrapunto tierno y humano del lado de la República. Porque todo lo demás muestra el lado facha de la historia” declaraba. También saca a Pau Casals preparando un concierto en el Palau de la Música con un emotivo final.
Llamó la atención que se viera el lado humano de Franco, a veces incluso con algún ligero toque de humor, como cuando su mujer pide que no sea muy ceñido el pantalón ya que lo hace gordo o cuando muestra su hartazgo con los gazpachos y que lo cambien por una tortilla. Hasta lo vemos en la cama hablar con su mujer y contarle que en París ha conocido taxistas que eran generales del zar y que no podía haber mayor deshonra…Precisamente para conocer más sobre esta vida anónima privada de él se contó con unos libros aparecidos entre 1936 y 1937, con las aportaciones de su primo Francisco Franco Salgado-Araújo (en la película interpretado por Pedro Díaz del Corral) y de su cuñado Serrano Suñer que se reunió varias veces con Gibson.
Juan Diego volvió a ofrecer una actuación académica, Camino lo eligió y quiso que se reflejara su mirada, la cual describía como hundida, oscura y siempre mirando de lado, algo que el actor cumplió perfectamente. Igualmente tuvo que perfeccionar la voz, que la tildaba de barítono, pero atiplada, fue de sus papeles más difíciles y le ocasionó insomnio. Para el papel de Carmen Polo escogió a Vicky Peña , prácticamente desconocida en el cine, y que demostraba lo excelente actriz y todoterreno que era.
Entre los problemas de la película está que a pesar de la voluntad de querer explicar bien todo, problemas con la producción obligaron a reducir metraje, así sorprende que no salgan Gonzalo Queipo de Llano o el General Sanjurjo, pero creo que las críticas hacia la película que casi llegaron a decir que era una apología de él son muy injustas, vemos escenas de un Franco cruel cuando pide que se disuelva una manifestación a tiros o a cañonazos. Por lo tanto y a pesar de que el ritmo de la película es algo irregular, Dragon Rapide hay que revisarla, y ya no solo por lo que nos cuenta, sino por ver en el cine español una aproximación objetiva, respetando al público para que sea él quien verdaderamente juzgue, algo de lo que por desgracia siempre ha carecido nuestro querido cine, ya estuviéramos en la Dictadura como en Democracia.
La pueden ver editada en DVD, aunque es probable que cueste encontrarla. Si no la tienen en la plataforma de RTVE PLAY.
El
pasado lunes fallecía el compositor Monty Norman, seguramente a más de uno no
le sonaría el nombre, fue quien compuso el tema de James Bond para 007 contra
el Dr. No, a partir de ahí aquella melodía siempre sonó al inicio de las
películas de la saga. Sin embargo, su autoría siempre fue puesta en evidencia por
John Barry que se consideraba el verdadero autor, motivo que hasta acabó en el
Juzgado y dando la razón al primero. Pero Barry tenía sus motivos, aunque
Norman tenía la prueba de que la mayoría de notas eran suyas ya que utilizó una canción previa propia para un musical que no llegó a estrenar, a los productores de
la saga no les llamaba la atención y llamaron a Barry que arregló y orquestó el
tema, así pues ese tema de 007 tal vez no hubiera sido lo mismo sin él, y a saber si hubiese sonado de esta forma tan rara.
Norman
ya no fue llamado para la segunda entrega Desde Rusia con amor, y Barry ya fue el
músico oficial y al que debemos que las películas aun fueran más entretenidas, concretamente
en esta compuso un tema infinitamente mejor que el citado y en el intento
fallido de que George Lazenby fuera el nuevo James Bond en Al servicio secreto de Su Majestad compuso otro, también
para mi gusto, excelente.
Así
pues, más de un medio debería poner
atención en lo que publica, pues he leído titulares como el siguiente: ”Fallece
el musico de las películas de James Bond”. No sé si algunos recordarán, los más
jóvenes ya no lo vieron, aquel programa de Tele 5 del "Caiga quien caiga" que
conducía el Gran Wyoming, dentro de este se emitía una sección que llevaba Juanjo
de la Iglesia que se titulaba “Curso de ética periodística” donde Juanjo de la
Iglesia repasaba irónicamente un titular de un diario ya fuese porque era erróneo o porque encerraba otros mensajes y mostraba cómo se tenía
que haber escrito para ser verdaderamente objetivo.
El
mundo de la banda sonora está en franca decadencia actualmente, no ya solo por
la falta de inspiración de los músicos, sino por la forma en que se utiliza,
antes casi cada gran película tenía asociada sus notas musicales. Nombres como
Rozsa, Bernstein, Goldsmith o Tiomkin fueron los continuadores de la música
clásica y en cierta medida no dejaban de ser cineastas también. Sin embargo,
muchos de sus trabajos no hubieran sido lo mismo sin los orquestadores, uno de
los trabajos más desagradecidos en la música ya que la mayoría permanecían en
el anonimato.
Precisamente estos días se recuerda también a Ennio Morricone y
más de uno comete el error de poner el tema de amor de Cinema Paradiso y que acompañaba
la última escena como suyo, pero lo había compuesto su hijo Andrea. Sin
embargo, no hubiera sonado igual sin la orquestación de su padre. Por tanto,
estamos ante el mismo dilema del tema de Bond: ¿Quién tiene más mérito, el que pone las notas o quien las arregla y adapta? La carrera de Andrea Morricone en el cine fue
corta y, salvo los que nos quedamos a ver los créditos, la mayoría concibe toda
la música como de Ennio, sobre todo ese tema que es el más recordado. Ya ni aparece el nombre de Andrea....
Mientras
escribo estas líneas La 2 está emitiendo El hombre que mató a Liberty Valance de
John Ford, sin querer hacer "spoiler", creo que para quien no la haya visto no le estaré
estropeando nada, se suelta esa frase de “En el oeste, cuando la leyenda supera
la verdad, publicamos la leyenda”. Pues bien, en la música, como casi todo en la vida, también. Así pues, que
cada uno elija quién compuso el tema de 007, razón no le faltará, pero si no quieren más quebraderos de cabeza, no
escuchen este tema Nightmare de Artie Shaw de 1938...
El pasado viernes acababa el espacio "Classics" de José Luis Garci en la Trece y lo hacía por todo lo alto con la emisión de Casablanca. A pesar de que se emitió hace poco en La 2 y nuestros DVDs están algo usados de tanto ponerla, la quise ver “in situ”, o sea aguantando la publicidad. Mala opción, llegaba uno de los momentos cumbre que es cuando cantan "La Marsellesa", me emociona tanto esa escena que incluso subí un poco el volumen, empiezan a cantar, pero todo se viene abajo, algún iluminado cortó para meter los anuncios.
Este corte pasará a la historia de los sacrilegios televisivos en lo que se refiere a la emisión de películas, corría el año 1986 y TVE programaba Con la muerte en los talones, en medio de la escena de la avioneta decidieron cortar, aquello en su día fue muy comentado, no sé si por entonces la directora de TVE, Pilar Miró, publicó algunas disculpas o cortó alguna cabeza. La TRECE como cadena privada que es, tiene todo el derecho de poner publicidad, es su fuente de ingreso y cuando acudo a su programación me la tengo que tragar. Pero de ahí a faltar el respeto a una película que es una obra de arte ya traspasa la línea roja, ignoro si José Luis Garci sabe algo al respecto, es de imaginar que se enfadase.
La Trinca en sus buenos tiempos cantaba aquello de "qué bonitos son los anuncios, qué lástima que los corten para dar programas"…
Cuando aparecieron las privadas el tema de los cortes en películas empeoró, ya nos había avisado Fellini de ello en Italia. Tele 5 que por aquel entonces tenía una excelente programación cinematográfica cortaba cada quince minutos, su entonces director general Valerio Lazarov incluso se inventó lo de cortar después de los créditos iniciales, aquello mareaba más que sus zooms, por suerte esa idea no prosperó, aunque en unas Navidades se le ocurrió dar la publicidad de los Turrones "El Lobo" con un concurso sacando al animal en un minuto determinado de la película aullando.
Antena 3 no cortaba tanto, pero sus interrupciones eran más largas, recuerdo un anuncio en prensa que decían que controlaban dónde cortaban para no enfadar al espectador. Si no querías anuncios en una privada, tenías que pagar el Canal Plus y si no aguantar, repito que era su medio de financiación y lo aceptaba, nunca dejé de ver películas en las privadas de esos tiempos por esta cuestión, pero recalco que los cortes eran casi siempre al acabar una escena o un diálogo.
Con el tiempo y otras cadenas, la cosa no mejoró. Apareció La Sexta 3 con una programación llena de películas, pero metían la publicidad salvajemente, ya fuese en medio de una canción o cuando faltaban dos minutos para el final. Decían que era debido a que tenían que cortar en el mismo momento que Antena3. Cuando La Sexta 3 dejó de funcionar muchos lo lamentaron, pero para servidor fue casi una alegría no tener que aguantar más esos tijeretazos.
En aquel tiempo, TVE ya había dejado de dar publicidad, pero coincidió esa decisión con un bajón tremendo de audiencia de la 1 y en vez de llenarnos las tardes de los fines de semana con clásicos sin publicidad, nos colocaron telefilmes que solo en su casa conocían ¿Tendría razón La Trinca en lamentar los cortes de los spots para dar espacios?
En fin, que el corte de Casablanca ha dado cierta mala imagen al programa de "Classics" y me deja un muy mal sabor de boca. Aquí en este blog escribí, después de comentar otros aspectos negativos de la Trece, que recuperar este espacio podía ser el inicio de una buena amistad. Por una parte, se ha mejorado en algunos aspectos, ya no quitan los créditos iniciales, los formatos al menos se han ido respetando con alguna pequeña trampilla como ensanchar algo el 4:3 original, se han buscado mejores copias…
Pero la amistad habrá que dejarla para la segunda temporada, a ver si llega…De momento me quedo con una frase que soltó Ugo Tognazzi en un programa de Àngel Casas cuando este le preguntaba cómo era la relación entre los actores italianos con los que había trabajado, este dijo con su habitual ironía: “Éramos enemigos íntimos”, así seguirá mi relación con la Trece 😉
El pasado 17 de junio fallecía el actor Jean Louis Trintignant
a los 91 años, no repasaré su carrera cinematográfica, pero sí una de sus
primeras películas con las que alcanzó no ya solo popularidad, sino un
reconocimiento artístico, estoy hablando de La escapada (1962) de Dino Risi.
Por cierto, hace dos meses también fallecía su protagonista Catherine Spaak,
así pues, sirva de homenaje este post.
La escapada en nuestro país fue un gran éxito. En Barcelona,
por ejemplo, estuvo 26 semanas seguidas en el desaparecido Cine Diagonal de
Barcelona. Para muchos suponía un canto a la vida, en el personaje de
Trintignant muchos veían reflejada esa represión a todos los niveles y enmarcada
en unas coordenadas temporales muy determinadas. El personaje de Gassman
suponía lo contrario, pero la habilidad del guion entre cuyos autores estaba
Ettore Scola perfilaba también otro ser infeliz a pesar de la apariencias. Ese viaje en ese Ferragosto (15 de agosto) no dejaba
de ser una “escapada” de lo que la vida deparaba en ambos.
Hablando de esta película, y viendo algún que otro
comentario, se incide mucho en el final que tiene, el cual no desvelaré por si
alguien no la ha visto. Los hay que lo ven con moralina, no creo que fuera esa
la intención principal y más siendo una producción italiana y francesa, las comedias
italianas no tenían que sufrir tanto el tema de la censura y tenían más
libertad para mostrar explícitamente sus mensajes.
El comienzo de la película no puede ser más brillante, un
Gassman al que vemos conduciendo un coche en una Roma desierta, su rostro se
refleja en el retrovisor, necesita realizar una llamada (¡qué tiempos en los
que el móvil no existía!), no encuentra a nadie hasta que por fin ve una ventana
abierta, ahí está Trintignant preparando sus exámenes con su timidez y cara de
buen chico,se ha de conformar con un
amor platónico observando a la vecina por la ventana. Le pide Gassman que le llame por
él, pero le deja entrar sin pensar quién podría ser ese desconocido. Le
convence para que deje esos libros por un día y le acompañe a vivir la vida, ve
en Gassman todo lo contario a él y su inseguridad le lleva a acompañarle.
Durante el trayecto, a través de una voz en off, refleja lo que siente y sus
ganas de querer ser como él.
La evolución del personaje de Gassman nos lleva a comprender
que él es un fracasado, que aquella alegría no deja de ser un ropaje con el que
ocultar sus miserias, y que también huye de sí mismo. Por tanto estamos ante
dos personajes antagónicos, pero que no han sabido encontrar su lugar. Durante
todo ese trayecto, veremos todo tipo de situaciones, cierto neorrealismo
también del que Risi había mostrado ya, pero que la crítica no había valorado y
lo tildaba de rosa en comparación con el que mostraba De Sica. Seguramente más
de un espectador en su primer visionado vio en La escapada una comedia
divertida, con una banda sonora repleta de canciones del momento, quizá oirían a García Lorca por primera vez y saldría del
cine algo pensativo. Ver esta película no dejaba de ser una
escapada particular de la vida de cada uno en medio de una sociedad sin apenas
valores que oculta como puede todo lo negativo. Por tanto, complicado huir de
esta si vas mucho más allá.
Dino Risi comentaba sobre el actor francés lo siguiente: “fue
escogido de milagro, el sábado no teníamos a nadie y comenzábamos a rodar el
lunes, había pensado en todo el mundo y le había descartado incluso a él porque
le había visto interpretar a un asesino y no me parecía adecuado para La
escapada. Pero su agente insistió mucho para que le conociera en persona por si
me daba otra impresión, él estaba en París, lo vi tímido y adaptado al
personaje. Contaré un secreto, antes de decidirme por él, ya había rodado dos
escenas suyas con un doble, cuando se ve al personaje al principio de la
película no es él. Tampoco en una de las escenas del coche con Gassman. Como ya
tenía este material rodado, deseaba que el papel fuera para un rubio porque el
doble era así”
Curiosamente, la vida de Trintignant tiene algún paralelismo
con su personaje, también estudiaba Derecho, pero huyó al cine, se sentía sin
talento. En 1957, Vadim lo contrata para Y Dios creó a la mujer, no aguantó la
presión que le situaban en pleno romance con Brigitte Bardot y entonces vio en
el ejército un "sorpasso". A pesar de trabajar con grandes directores, no se
sentía muy satisfecho con su carrera y llegó a decir que es mejor dejar
olvidados 100 títulos.
Y tal como decía al comienzo, falleció también Catherine
Spaak, aunque a muchos ya ni les sonará el nombre, en su momento hasta puso de
moda su peinado: corte largo y recto con flequillo. Dulces engaños de Alberto
Lattuada fue su primer papel famoso, había aparecido sin acreditar dos años
antes en la mítica La evasión de Jacques Becker. Con Damiano Damiani trabajó en La noia con Bette
Davis. En La armada Brancaleone volvió a compartir cartel con Gassman, su fama
la llevó a Hollywood donde Richard Quine la dirigió en Intriga en el Gran
Hotel, sin embargo quiso volver a Europa. Mario Camus le dio el papel
protagonista en Los pájaros de Baden Baden. Descansen en paz.