29/07/2022

La trilogía de los "Guapos, pero pobres" de Dino Risi en DVD

 

Hace unos días, mientras navegaba por la red social Twitter encontré a un usuario que colgaba fotos de un famoso centro comercial de Madrid donde antaño sus estanterías se llenaban de DVDs, en cambio ahora unos feos muñecos peludos los han sustituido. Como dirían aquellos curas de antaño, son los “signos de los tiempos”, pero sin querer tampoco ser tan pesimista, es una realidad que la desaparición del formato físico lleva consigo un retraso cultural y con ello que nos marquen lo que podemos ver. Seguro que los que aun coleccionamos estas ya casi reliquias nos habremos encontrado con diálogos del tipo “para qué quiero eso si ya está en esa plataforma”, luego se lamentan si aquel sitio de golpe y porrazo deja de tener tal película y te sueltan aquello de “si lo llego a saber, la compro”.

 Hay películas, no obstante, que no están en ninguna plataforma y sí en DVD, precisamente hoy quiero recomendar tres dirigidas por Dino Risi, que los habituales en mi blog ya saben que es una de mis debilidades. Se trata de la denominada “Trilogía del optimismo” y está compuesta por Pobres, pero guapos (1957), Guapas, pero pobres (1957) y Pobre millonario (1959). En otros países se han editado conjuntamente en un pack. En la edición en España de estas no aparece la marca, aunque he comprobado que se trata de un disco prensado, o sea que no hay que temer nada, se pueden ver dobladas y en versión original con subtítulos, la calidad de imagen es bastante buena.

Dino Risi

A Dino Risi nunca se le ha acabado de reconocer como se merece su carrera, en medio de ese Neorrealismo italiano que tanto impacto causó por su austeridad, falta de grandes estrellas y bastante amargura, él tomó otra vía al que rápidamente se le tachó despectivamente de “Neorrealismo rosa”, en los repartos contaba con las estrellas del momento, había humor y uno salía contento del cine. De todas maneras esa felicidad solo era aparente, él fue todo un maestro en enseñarnos un tipo de comedia “falsa” en la que el público menos exigente no prestaba mucha atención a lo que en realidad se decía y podía verla sin pensar que acudía a un drama.

La crítica oficial de entonces que tenía a De Sica como su gurú antes de que apareciera Godard y se olvidaran de él, vio con malos ojos esas películas, en cambio los cinéfilos más jóvenes empezaron a valorarlo. Esta guerra entre críticos tuvo su punto álgido en 1957 cuando su película Sabela gana la Concha de oro del Festival de San Sebastián y provocó más de un silbido entre ese público que también te decía que si eras de Rossellini no podías ser de Visconti. Años más tarde y a raíz de La escapada, el cine de Risi empezó a ser ya más aceptado, aunque ello coincidió con un cambio de estilo, ya no había tanta comicidad, el pesimismo ya se mostraba sin ropajes y la imagen de Italia era que no tenia remedio, como bien reflejó en aquella espléndida En el nombre del pueblo italiano.

En esta trilogía asistimos a las andanzas amorosas de dos jóvenes agraciados físicamente, aunque no en el bolsillo (Renato Salvatori que estaba perfecto en las comedias, a pesar de haber cultivado más los dramas y Maurizio Arena, que no tuvo suerte posteriormente). Hay en toda la película situaciones que bien podrían ser herederas de Charlot, Salvatori vive de realquilado, pero no puede utilizar su cama durante el día ya que la ha de alquilar para un conductor, por ejemplo. Una de las mejores escenas es cuando entran en la tienda donde despacha la chica de la que se han enamorado los dos. (NOTA: l siguiente vídeo es de Youtube y la calidad de imagen no es muy buena, la del DVD sí que está remasterizada)


Creo que disfrutarán con estas películas, seguramente si van a comprarlas ni las vean expuestas y tendrán que pedirlas. No esperen a que tal plataforma las ponga, la desaparición del formato físico llevaría a que no pudiésemos seguir las filmografías de directores tan interesantes como el que propongo y a no poder valorar, comparar y tener un juicio objetivo de la historia del cine. 

22/07/2022

Dragon Rapide (1986), de cuando el cine español pretendía ser objetivo



Aprovechando la efeméride y con el objetivo de reivindicar esta película algo olvidada, traigo esta semana Dragon Rapide (1986) de Jaime Camino. Sé que mis lectores son instruidos, pero para aquellos que navegando se encuentren esta página, siempre que Google quiera, y sean victimas de los planes de educación actuales, decirles que no les hablaré de una película japonesa de artes marciales ni nada parecido. El Dragon Rapide era un avión, concretamente un De Havilland (DH) 89, que financiado por Juan March vino desde Inglaterra y trasladó a Franco a Tetuán desde Las Canarias para ponerse al frente del ejército de Marruecos en lo que fue el inicio oficial de la Guerra Civil española aquel julio de 1936.

 Jaime Camino que tenía entonces en su haber tres grandes películas sobre el tema: España, otra vez, (1968),  Las largas vacaciones del 36 (1976) y La vieja memoria (1979), llevaba tiempo queriendo llevar este tema y como en 1986 se iban a cumplir los 50 años de aquello, recurrió a Román Gubern para que escribiera el guion y contrató a Ian Gibson para asesorarle. El director bien sabía porque había esperado tanto tiempo en llevarlo a la pantalla ya que provocaría controversias en una España que ya llevaba una década de transición.

 Así pues declaraba que: “creo que la gente va a recibir la película con expectación y creo que va a suscitar polémica porque sobre Franco cada uno tiene su opinión, para los que lo tienen sacralizado, será una sorpresa encontrarlo mucho más de carne y hueso. La gente de izquierdas maniquea, que aun piense en los buenos y los malos, se encontrará con que en el film es un personaje entendido, explicado, con todas sus dudas, que las tuvo”. Gubern sugirió y acabó aportando un personaje falso, el del periodista que tenía que empezar las vacaciones justo el 18 de julio, para “dar el contrapunto tierno y humano del lado de la República. Porque todo lo demás muestra el lado facha de la historia” declaraba. También saca a Pau Casals preparando un concierto en el Palau de la Música con un emotivo final.

    

 Llamó la atención que se viera el lado humano de Franco, a veces incluso con algún ligero toque de humor, como cuando su mujer pide que no sea muy ceñido el pantalón ya que lo hace gordo o cuando muestra su hartazgo con los gazpachos y que lo cambien por una tortilla. Hasta lo vemos en la cama hablar con su mujer y contarle que en París ha conocido taxistas que eran generales del zar y que no podía haber mayor deshonra…Precisamente para conocer más sobre esta vida anónima privada de él se contó con unos libros aparecidos entre 1936 y 1937, con las aportaciones de su primo Francisco Franco Salgado-Araújo (en la película interpretado por Pedro Díaz del Corral) y de su cuñado Serrano Suñer que se reunió varias veces con Gibson.

 Juan Diego volvió a ofrecer una actuación académica, Camino lo eligió y quiso que se reflejara su mirada, la cual describía como hundida, oscura y siempre mirando de lado, algo que el actor cumplió perfectamente. Igualmente tuvo que perfeccionar la voz, que la tildaba de barítono, pero atiplada, fue de sus papeles más difíciles y le ocasionó insomnio. Para el papel de Carmen Polo escogió a Vicky Peña , prácticamente desconocida en el cine, y que demostraba lo excelente actriz y todoterreno que era. 

 

 Entre los problemas de la película está que a pesar de la voluntad de querer explicar bien todo, problemas con la producción obligaron a reducir metraje, así sorprende que no salgan Gonzalo Queipo de Llano o el General Sanjurjo, pero creo que las críticas hacia la película que casi llegaron a decir que era una apología de él son muy injustas, vemos escenas de un Franco cruel cuando pide que se disuelva una manifestación a tiros o a cañonazos. Por lo tanto y a pesar de que el ritmo de la película es algo irregular, Dragon Rapide hay que revisarla, y ya no solo por lo que nos cuenta, sino por ver en el cine español una aproximación objetiva, respetando al público para que sea él quien verdaderamente juzgue, algo de lo que por desgracia siempre ha carecido nuestro querido cine, ya estuviéramos en la Dictadura como en Democracia.

La pueden ver editada en DVD, aunque es probable que cueste encontrarla. Si no la tienen en la plataforma de RTVE PLAY.

https://www.rtve.es/play/videos/cine-de-siempre/dragon-rapide/6516727/

15/07/2022

Monty Norman y la leyenda del tema musical de Bond

 



El pasado lunes fallecía el compositor Monty Norman, seguramente a más de uno no le sonaría el nombre, fue quien compuso el tema de James Bond para 007 contra el Dr. No, a partir de ahí aquella melodía siempre sonó al inicio de las películas de la saga. Sin embargo, su autoría siempre fue puesta en evidencia por John Barry que se consideraba el verdadero autor, motivo que hasta acabó en el Juzgado y dando la razón al primero. Pero Barry tenía sus motivos, aunque Norman tenía la prueba de que la mayoría de notas eran suyas ya que utilizó una canción previa propia para un musical que no llegó a estrenar, a los productores de la saga no les llamaba la atención y llamaron a Barry que arregló y orquestó el tema, así pues ese tema de 007 tal vez no hubiera sido lo mismo sin él, y a saber si hubiese sonado de esta forma tan rara.


 Norman ya no fue llamado para la segunda entrega Desde Rusia con amor, y Barry ya fue el músico oficial y al que debemos que las películas aun fueran más entretenidas, concretamente en esta compuso un tema infinitamente mejor que el citado y en el intento fallido de que George Lazenby fuera el nuevo James Bond en Al servicio secreto de Su Majestad compuso otro, también para mi gusto, excelente. 

Así pues, más de un medio debería poner atención en lo que publica, pues he leído titulares como el siguiente: ”Fallece el musico de las películas de James Bond”. No sé si algunos recordarán, los más jóvenes ya no lo vieron, aquel programa de Tele 5 del "Caiga quien caiga" que conducía el Gran Wyoming, dentro de este se emitía una sección que llevaba Juanjo de la Iglesia que se titulaba “Curso de ética periodística” donde Juanjo de la Iglesia repasaba irónicamente un titular de un diario ya fuese porque era erróneo o porque encerraba otros mensajes y mostraba cómo se tenía que haber escrito para ser verdaderamente objetivo.

El mundo de la banda sonora está en franca decadencia actualmente, no ya solo por la falta de inspiración de los músicos, sino por la forma en que se utiliza, antes casi cada gran película tenía asociada sus notas musicales. Nombres como Rozsa, Bernstein, Goldsmith o Tiomkin fueron los continuadores de la música clásica y en cierta medida no dejaban de ser cineastas también. Sin embargo, muchos de sus trabajos no hubieran sido lo mismo sin los orquestadores, uno de los trabajos más desagradecidos en la música ya que la mayoría permanecían en el anonimato.

 Precisamente estos días se recuerda también a Ennio Morricone y más de uno comete el error de poner el tema de amor de Cinema Paradiso y que acompañaba la última escena como suyo, pero lo había compuesto su hijo Andrea. Sin embargo, no hubiera sonado igual sin la orquestación de su padre. Por tanto, estamos ante el mismo dilema del tema de Bond: ¿Quién tiene más mérito, el que pone las notas o quien las arregla y adapta? La carrera de Andrea Morricone en el cine fue corta y, salvo los que nos quedamos a ver los créditos, la mayoría concibe toda la música como de Ennio, sobre todo ese tema que es el más recordado. Ya ni aparece el nombre de Andrea....

Mientras escribo estas líneas La 2 está emitiendo El hombre que mató a Liberty Valance de John Ford, sin querer hacer "spoiler", creo que para quien no la haya visto no le estaré estropeando nada, se suelta esa frase de “En el oeste, cuando la leyenda supera la verdad, publicamos la leyenda”. Pues bien, en la música, como casi todo en la vida, también. Así pues, que cada uno elija quién compuso el tema de 007, razón no le faltará, pero si no quieren más quebraderos de cabeza, no escuchen este tema Nightmare de Artie Shaw de 1938...



08/07/2022

Publicidad mientras cantan La Marsellesa en Casablanca

 

 El pasado viernes acababa el espacio "Classics" de José Luis Garci en la Trece y lo hacía por todo lo alto con la emisión de Casablanca. A pesar de que se emitió hace poco en La 2 y nuestros DVDs están algo usados de tanto ponerla, la quise ver “in situ”, o sea aguantando la publicidad. Mala opción, llegaba uno de los momentos cumbre que es cuando cantan "La Marsellesa", me emociona tanto esa escena que incluso subí un poco el volumen, empiezan a cantar, pero todo se viene abajo, algún iluminado cortó para meter los anuncios.

 Este corte pasará a la historia de los sacrilegios televisivos en lo que se refiere a la emisión de películas, corría el año 1986 y TVE programaba Con la muerte en los talones, en medio de la escena de la avioneta decidieron cortar, aquello en su día fue muy comentado, no sé si por entonces la directora de TVE, Pilar Miró, publicó algunas disculpas o cortó alguna cabeza. La TRECE como cadena privada que es, tiene todo el derecho de poner publicidad, es su fuente de ingreso y cuando acudo a su programación me la tengo que tragar. Pero de ahí a faltar el respeto a una película que es una obra de arte ya traspasa la línea roja, ignoro si José Luis Garci sabe algo al respecto, es de imaginar que se enfadase.

 La Trinca en sus buenos tiempos cantaba aquello de "qué bonitos son los anuncios, qué lástima que los corten para dar programas"…  

 Cuando aparecieron las privadas el tema de los cortes en películas empeoró, ya nos había avisado Fellini de ello en Italia. Tele 5 que por aquel entonces tenía una excelente programación cinematográfica cortaba cada quince minutos, su entonces director general Valerio Lazarov incluso se inventó lo de cortar después de los créditos iniciales, aquello mareaba más que sus zooms, por suerte esa idea no prosperó, aunque en unas Navidades se le ocurrió dar la publicidad de los Turrones "El Lobo" con un concurso sacando al animal en un minuto determinado de la película aullando.

 Antena 3 no cortaba tanto, pero sus interrupciones eran más largas, recuerdo un anuncio en prensa que decían que controlaban dónde cortaban para no enfadar al espectador. Si no querías anuncios en una privada, tenías que pagar el Canal Plus y si no aguantar, repito que era su medio de financiación y lo aceptaba, nunca dejé de ver películas en las privadas de esos tiempos por esta cuestión, pero recalco que los cortes eran casi siempre al acabar una escena o un diálogo.

 Con el tiempo y otras cadenas, la cosa no mejoró. Apareció La Sexta 3 con una programación llena de películas, pero metían la publicidad salvajemente, ya fuese en medio de una canción o cuando faltaban dos minutos para el final. Decían que era debido a que tenían que cortar en el mismo momento que Antena3. Cuando La Sexta 3 dejó de funcionar muchos lo lamentaron, pero para servidor fue casi una alegría no tener que aguantar más esos tijeretazos. En aquel tiempo, TVE ya había dejado de dar publicidad, pero coincidió esa decisión con un bajón tremendo de audiencia de la 1 y en vez de llenarnos las tardes de los fines de semana con clásicos sin publicidad, nos colocaron telefilmes que solo en su casa conocían ¿Tendría razón La Trinca en lamentar los cortes de los spots para dar espacios?

 En fin, que el corte de Casablanca ha dado cierta mala imagen al programa de "Classics" y me deja un muy mal sabor de boca. Aquí en este blog escribí, después de comentar otros aspectos negativos de la Trece, que recuperar este espacio podía ser el inicio de una buena amistad. Por una parte, se ha mejorado en algunos aspectos, ya no quitan los créditos iniciales, los formatos al menos se han ido respetando con alguna pequeña trampilla como ensanchar algo el 4:3 original, se han buscado mejores copias…

Pero la amistad habrá que dejarla para la segunda temporada, a ver si llega…De momento me quedo con una frase que soltó Ugo Tognazzi en un programa de Àngel Casas cuando este le preguntaba cómo era la relación entre los actores italianos con los que había trabajado, este dijo con su habitual ironía: “Éramos enemigos íntimos”, así seguirá mi relación con la Trece 😉

01/07/2022

La escapada (1962) del tímido Jean Lous Trintignant

 



El pasado 17 de junio fallecía el actor Jean Louis Trintignant a los 91 años, no repasaré su carrera cinematográfica, pero sí una de sus primeras películas con las que alcanzó no ya solo popularidad, sino un reconocimiento artístico, estoy hablando de La escapada (1962) de Dino Risi. Por cierto, hace dos meses también fallecía su protagonista Catherine Spaak, así pues, sirva de homenaje este post.

La escapada en nuestro país fue un gran éxito. En Barcelona, por ejemplo, estuvo 26 semanas seguidas en el desaparecido Cine Diagonal de Barcelona. Para muchos suponía un canto a la vida, en el personaje de Trintignant muchos veían reflejada esa represión a todos los niveles y enmarcada en unas coordenadas temporales muy determinadas. El personaje de Gassman suponía lo contrario, pero la habilidad del guion entre cuyos autores estaba Ettore Scola perfilaba también otro ser infeliz a pesar de la apariencias. Ese viaje en ese Ferragosto (15 de agosto) no dejaba de ser una “escapada” de lo que la vida deparaba en ambos.


Hablando de esta película, y viendo algún que otro comentario, se incide mucho en el final que tiene, el cual no desvelaré por si alguien no la ha visto. Los hay que lo ven con moralina, no creo que fuera esa la intención principal y más siendo una producción italiana y francesa, las comedias italianas no tenían que sufrir tanto el tema de la censura y tenían más libertad para mostrar explícitamente sus mensajes. 

El comienzo de la película no puede ser más brillante, un Gassman al que vemos conduciendo un coche en una Roma desierta, su rostro se refleja en el retrovisor, necesita realizar una llamada (¡qué tiempos en los que el móvil no existía!), no encuentra a nadie hasta que por fin ve una ventana abierta, ahí está Trintignant preparando sus exámenes con su timidez y cara de buen chico,  se ha de conformar con un amor platónico observando a la vecina por la ventana. Le pide Gassman que le llame por él, pero le deja entrar sin pensar quién podría ser ese desconocido. Le convence para que deje esos libros por un día y le acompañe a vivir la vida, ve en Gassman todo lo contario a él y su inseguridad le lleva a acompañarle. Durante el trayecto, a través de una voz en off, refleja lo que siente y sus ganas de querer ser como él.

La evolución del personaje de Gassman nos lleva a comprender que él es un fracasado, que aquella alegría no deja de ser un ropaje con el que ocultar sus miserias, y que también huye de sí mismo. Por tanto estamos ante dos personajes antagónicos, pero que no han sabido encontrar su lugar. Durante todo ese trayecto, veremos todo tipo de situaciones, cierto neorrealismo también del que Risi había mostrado ya, pero que la crítica no había valorado y lo tildaba de rosa en comparación con el que mostraba De Sica. Seguramente más de un espectador en su primer visionado vio en La escapada una comedia divertida, con una banda sonora repleta de canciones del momento, quizá oirían a García Lorca por primera vez y saldría del cine algo pensativo. Ver esta película no dejaba de ser una escapada particular de la vida de cada uno en medio de una sociedad sin apenas valores que oculta como puede todo lo negativo. Por tanto, complicado huir de esta si vas mucho más allá.

Dino Risi comentaba sobre el actor francés lo siguiente: “fue escogido de milagro, el sábado no teníamos a nadie y comenzábamos a rodar el lunes, había pensado en todo el mundo y le había descartado incluso a él porque le había visto interpretar a un asesino y no me parecía adecuado para La escapada. Pero su agente insistió mucho para que le conociera en persona por si me daba otra impresión, él estaba en París, lo vi tímido y adaptado al personaje. Contaré un secreto, antes de decidirme por él, ya había rodado dos escenas suyas con un doble, cuando se ve al personaje al principio de la película no es él. Tampoco en una de las escenas del coche con Gassman. Como ya tenía este material rodado, deseaba que el papel fuera para un rubio porque el doble era así”

Curiosamente, la vida de Trintignant tiene algún paralelismo con su personaje, también estudiaba Derecho, pero huyó al cine, se sentía sin talento. En 1957, Vadim lo contrata para Y Dios creó a la mujer, no aguantó la presión que le situaban en pleno romance con Brigitte Bardot y entonces vio en el ejército un "sorpasso". A pesar de trabajar con grandes directores, no se sentía muy satisfecho con su carrera y llegó a decir que es mejor dejar olvidados 100 títulos.


Y tal como decía al comienzo, falleció también Catherine Spaak, aunque a muchos ya ni les sonará el nombre, en su momento hasta puso de moda su peinado: corte largo y recto con flequillo. Dulces engaños de Alberto Lattuada fue su primer papel famoso, había aparecido sin acreditar dos años antes en la mítica La evasión de Jacques Becker. Con Damiano Damiani trabajó en La noia con Bette Davis. En La armada Brancaleone volvió a compartir cartel con Gassman, su fama la llevó a Hollywood donde Richard Quine la dirigió en Intriga en el Gran Hotel, sin embargo quiso volver a Europa. Mario Camus le dio el papel protagonista en Los pájaros de Baden Baden. Descansen en paz.

El reportero (Michelangelo Antonioni, 1975)

La figura del director Michelangelo Antonioni con el tiempo ha sufrido evoluciones que van desde quienes lo consideran todo un genio del sé...